Generalmente es un lugar
privilegiado y lleno de estampas hermosas para ver a las cofradías, pero para el
próximo Via Crucis Magno, el Patio de los Naranjos tendrá una utilidad
diferente: la de acoger a los músicos y costaleros de refresco que no puedan
entrar en el interior de la Catedral mientras sus cofradías están allí. El
Cabildo Catedral autorizó en la mañana de ayer que el Patio de los Naranjos esté
cerrado mientras dure la gran procesión del próximo día 14.
Lo confirmó el presidente de la Agrupación de Cofradías, Francisco Gómez
Sanmiguel, que explicó que allí esperarán los costaleros de relevo que no estén
bajo los pasos y los miembros de las bandas de música que aguarden a volver a
ponerse tras las imágenes. «Allí se habilitará además un pequeño hospital de
campaña para atender problemas que puedan surgir», explicó Sanmiguel. La
autorización soluciona un aspecto de la logística ya que, como recordó el
presidente, se trata de más de 3.000 personas entre todos los músicos y
costaleros que tendrán que realizar la espera.
Bandas desde dentro
Eso permitirá ganar espacio en otro sentido. Las bandas se unirán tras las
hermandades a las que sigan en el Patio de los Naranjos, aunque no tocarán hasta
que no salgan por las Puertas del Perdón o de Santa Catalina. «Se encajarán y no
será necesario buscarles un lugar en estas puertas, que estarán llenas de
gente», explicó el presidente, que se felicitó por que el Cabildo Catedral haya
accedido a esta petición que entienden como beneficiosa para la organización de
la cita.
Francisco Gómez Sanmiguel avanzó además algunos detalles sobre la organización
del acto, que comenzará de forma solemne a una hora muy concreta: las 20.45
horas. En ese momento está previsto que llegue al Triunfo el paso de palio de
Nuestra Señora Reina de los Mártires, el primero del cortejo. El obispo de
Córdoba, Demetrio Fernández, encabecerá una solemne procesión litúrgica que
partirá desde la puerta de San Miguel de la Catedral y recorrerá la calle
Torrijos para llegar hasta la altura de la Dolorosa. Será el preciso momento en
que dé comienzo el acto: lo anterior habrán sido traslados hasta el lugar
central.
Allí se hará un acto en recuerdo de los Mártires de Córdoba que la imagen lleva
en su advocación y también en un pequeño relicario en su paso. «Córdoba es la
segunda ciudad de la cristiandad con más mártires, sólo después de Roma, y era
de justicia hacerlo», explicó. El obispo presidirá una pequeña ceremonia donde
se hará una ofrenda de cera y flor a la imagen. Al final, se rezará la Oración a
los Santos Mártires de Córdoba, vinculada de forma tradicional a las reliquias
que se conservan y veneran en San Pedro. La lectura correrá a cargo de la
cofradía de la Misericordia, fusionada con la de los Mártires en el año 2000. La
imagen seguirá después con su camino hacia la Catedral, acompañada por la banda
de música, a diferencia del resto. Desde ahí comenzará el Via Crucis propiamente
dicho: el obispo ocupará el lugar desde el que se recibirá a toda la secuencia
que relata la Pasión de Cristo. Hará una meditación tras la lectura de las
estaciones, que realizará el cofrade Fermín Pérez.
Luis Miranda - Diario ABC de Córdoba 7/9/2013